Este jueves, 13 de junio, se celebra el Día Mundial del Cáncer de Piel
El principal factor de riesgo para el cáncer de piel –melanoma o no melanoma– es la radiación solar, concretamente la radiación ultravioleta (UV). Por tanto, el riesgo de desarrollar un tumor cutáneo es superior en las zonas más soleadas, tal y como demuestra la mayor incidencia de melanoma, hasta tres veces superior, en los archipiélagos y sur de la península frente al resto del país; o que la incidencia de cánceres de piel no melanoma es más de 100 veces superior en Australia –1.035 casos en hombres y 472 en mujeres por cada 100.000 habitantes y año– que en Finlandia –6 casos en varones y 4 en mujeres por 100.000 habitantes y año.
Sea como fuere, la mejor intervención para prevenir el desarrollo de un cáncer de piel es evitar la exposición al sol en las horas en las que la radiación es más fuerte –entre las 12:00 y las 16:00 horas– y usar fotoprotectores solares adecuados.
Cáncer de piel no melanoma
Además, como explica la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), miembro de Somos Pacientes, “en el carcinoma cutáneo no melanoma de piel es muy importante el acúmulo de horas de exposición al sol a lo largo de la vida, más que la intensidad de la exposición a la luz solar, que en cambio es un factor más importante para el desarrollo del melanoma”.
Y es que contrariamente a como sucede con los melanomas, más común no solo en la población mayor de 65 años, sino también en los menores de edad, la incidencia de cáncer de piel no melanoma aumenta significativamente con la edad, resultando ciertamente infrecuente antes de cumplir los 45 años.
A todo ello se aúna, por último, “que la exposición a radiaciones ionizantes también es un factor de riesgo para los tumores cutáneos no-melanoma, sobre todo el carcinoma de células basales; y asimismo, que las enfermedades que causan inmunosupresión, como el sida, el uso crónico de esteroides y el tratamiento inmusupresor por trasplantes de órganos, también aumentan la incidencia de los carcinomas cutáneos no-melanoma”, recuerda la AECC.